Famoso como el vestido de la bandera británica, es uno de los íconos más memorables de la moda pop de los años 90.
Geri Halliwell (Ginger Spice) lució por primera vez su icónico minivestido durante la presentación de las Spice Girls en los Brit Awards de 1997 celebrados en Earls Court Exhibition Centre.
El vestido original era un minivestido negro de Gucci, pero Geri lo consideró “demasiado aburrido”. Así que le pidió a su hermana Natalie que cosiera una toalla de cocina con la bandera del Reino Unido (Union Jack) en la parte delantera del vestido Gucci.
El detalle de atrás la liberó de ser asociada con grupos nacionalistas, pues añadió un símbolo de la paz. En la época sin redes sociales, se puede decir que la imagen de Geri con el vestido “se volvió viral” porque apareció en portadas de periódicos de todo el mundo al día siguiente.
El vestido ostentó un Récord Guinness como la prenda de una estrella pop más cara vendida en una subasta. En 1998, Geri Halliwell subastó el vestido en Sotheby’s por £41,320 libras (más de 90 mil libras en valor actual) - más de 2 millones de pesos mexicanos. El comprador fue Peter Morton, fundador del Hard Rock Café; el vestido se exhibe como pieza de memorabilia pop en la sucursal de Las Vegas.
En 2010, fue votado como el vestido más icónico de los últimos 50 años, superando incluso al de Marilyn Monroe.
Geri lo volvió a usar (con una versión diferente) en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Asimismo, durante la gira de 2019, utilizó una versión reinventada, que conservaba los colores, pero era un vestido largo, como de princesa.