Con todo su encanto y fragilidad, tu michi seguramente te manipula. Aquí te decimos cómo lo hace.
Las tiernas miradas gatunas, una de las formas en que tu michi podría manipularte. (Getty Images)
Los gatos, esos adorables y misteriosos compañeros peludos, tienen una habilidad innata para manipular sutilmente a sus dueños. Aunque muchos los consideran mascotas independientes, la verdad es que los michis son maestros en obtener lo que desean de nosotros. ¿Cómo lo logran? Aquí te decimos algunas de las estrategias con las que podría estarte manipulando tu minino, que además, son respaldadas por estudios científicos.
¿Cómo nos manipulan los gatos?
Ronroneando
El ronroneo de un gato no solo es un sonido reconfortante, sino también una táctica de manipulación gatuna muy efectiva. Según un estudio publicado en la revista ‘Current Biology’, los gatos pueden modular su ronroneo para generar una frecuencia que coincida con la de un bebé humano llorando, lo que despierta el instinto de cuidado en los humanos, sobre todo de las mujeres, y los hace más propensos a satisfacer las necesidades del gato.
Con su mirada
Los gatos pueden utilizar su mirada para comunicarse con sus dueños de una manera que les da el poder. Una investigación de la Universidad de Tokio descubrió que los gatos domésticos, al igual que los bebés, pueden hacer contacto visual prolongado con los humanos para obtener lo que quieren. Esta mirada tierna y penetrante puede derretir hasta el corazón más resistente, llevando a los dueños a ceder ante las demandas felinas.
Por medio de maullidos muy específicos
Los maullidos de los gatos no son todos iguales; de hecho, pueden variar en tono y duración dependiendo de lo que el gato esté tratando de comunicar. Un estudio publicado en ‘Animal Cognition’ reveló que los gatos aprenden a modificar sus maullidos para manipular a sus dueños, utilizando diferentes sonidos para expresar hambre, solicitar de atención o incluso exigir que les abran la puerta para salir.
Con su comportamiento
Los gatos también son expertos en mostrar comportamientos manipuladores, como ignorar a sus dueños después de recibir un regaño o acercarse cariñosamente cuando desean algo. Un estudio realizado en la Universidad de Sussex encontró que los gatos son capaces de recordar experiencias pasadas y ajustar su comportamiento para maximizar las recompensas de sus dueños.
Como verás, los gatos son maestros en el arte de la manipulación sutil. Desde su encantador ronroneo hasta sus miradas hipnóticas, los “felinis” saben exactamente cómo conseguir lo que quieren de sus dueños. Sin embargo, a pesar de sus tácticas manipuladoras, son lo más adorable de este planeta, así que fingiremos ante ellos que no hemos leído esta nota y los seguiremos queriendo como siempre.
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